B»H
Las que vivimos en los Estados Unidos ya estamos en la onda del día de Acción de Gracias, así lo celebremos con pavo y todo el banquete, o no. Honestamente, es lindo ver el mundo que nos rodea celebrando, y tal vez adoptando, una actitud que nos puede ayudar a todos tanto en nuestra vida diaria, como en nuestro estado emocional: ¡el agradecimiento!
Afortunadamente, como judíos tenemos una larga tradición de acción de gracias. De hecho, básicamente tenemos esta idea incrustada en nuestro DNA espiritual. Nos llamamos «yehudim» (judíos), de la palabra en hebreo «hodaá» (agradecimiento). Si, somos llamados «los agradecidos».
מוֹדֶה אֲנִי לְפָנֶיךָ מֶלֶךְ חַי וְקַיָּם, שֶׁהֶחֱזַרְתָּ בִּי נִשְׁמָתִי בְּחֶמְלָה. רַבָּה אֱמוּנָתֶךָ
De hecho, por miles de años nuestra tradición ha sido que nuestros primeros pensamientos y palabras conscientes en el momento en que nos despertamos son el Modé Aní. Estas son doce cortas, pero poderosas, palabras que sientan el tono de todo nuestro día y condicionan nuestra mente para el resto de nuestras vidas. «Te doy gracias a Ti, Rey viviente y eterno, que me has devuelto mi alma con compasión.»
Recientemente estuve en la celebración del Bar Mitzvá de un niño nos recordó a todos la importancia y el significado del agradecimiento. Como parte de su discurso, nos exhortó a llevarnos a casa tarjetas laminadas con las palabras del Modé Aní y su explicación. Luego nos pidió un regalo de cumpleaños: ¡decir estas palabras al despertarnos!
Esta es la linda explicación que Mendel compartió con nosotros en esas tarjetas, una de las cuales, aún guardo.
«Estas son las primeras palabras que pronunciamos cada mañana- mientras aún estamos en la cama. Nuestro primer momento consciente del día lo dedicamos a agradecer a Di-s por el regalo de la vida. No importa lo que hayamos hecho la noche anterior, nada puede manchar la pureza de esas primeras palabras que marcan el comienzo de nuestro día consciente… Imagínate acostado mientras un rey o un presidente, esta frente a ti, esperando que te alistes para cumplir una importante misión. Bueno, no es un rey ni un presidente. Es el que crea y da vida a los reyes, presidentes, y a todo el mundo, en todo momento– y a ti también. Nuevamente. Hoy también.»
Sólo unas cortas semanas después de esa noche memorable, nuestro querido amigo Mendel, dejó el mundo físico, dejando un vacío irreparable. Más sin embargo, su deseo de regalo de Bar Mitzvá, honrado por muchos, ha creado un cambio eterno en este mundo.
Durante el día de Acción de Gracias, agarremos las señales del mundo que nos rodea para acordarnos de lo que es esencial a nuestro ser como judíos: el agradecimiento. Accesemos nuestra esencia y tratemos de tener esta mentalidad todos los días, desde el primer momento en el que nos despertamos. Como nos dijo Mendel durante su discurso, «es corto, fácil, y cambiara sus vidas.» Trátalo. Te podría cambiar la vida. :-)
Y ahora las dejo, que tengo un banquete que cocinar… (puede ser q incluya pavo, o no…) ;-)
¡Shabbat Shalom!
Fotos por Yael para Jewish Latin Princess.